Dedicatoria de tesis a Dios
El amor y la vida parecieren ser infinitos cuando a esta la disfrutamos, pareciera que el amor que recibimos de todas las personas a nuestro alrededor nos basta para sustentarnos, lo que ignoramos de esta bella fantasía, es la simpleza de la vida, es el darnos cuenta de que todas aquellas cosas materiales en las cuales pareciere que nos deleitamos, son simplemente bienes pasajeros.
Con dichos bienes pasajeros, nos referimos a personas y cosas que algún día en algún momento dejarán de existir y dejarán de causar esa satisfacción en nosotros, pero lo que debemos entender y lo cual traerá y servirá de mucho para nuestras vidas, es el hecho de que Dios es eterno, de la misma manera en la que su amor por ti y por mí, de su parte es infinito, si, infinito y nunca dejará de serlo.
Por eso, teniendo en cuenta lo dicho y lo comentado sobre los bienes pasajeros de la vida, y el que este ser omnipotente que conocemos como Dios se mantiene siempre presente en nuestras vidas, dentro de esta dedicatoria de tesis a Dios, comprenderemos y tratáremos de vivificar ese incomprensible e infinito amor.
El padre santo nos demuestra su amor cada día
Desde el inicio de nuestro día podemos decir que la vida que nos rodea es simplemente hermosa, cada célula viva en movimiento a nuestro alrededor embellece claramente nuestra perspectiva hacia la vida, cada flor y cada detalle de la naturaleza que a simple vista se constituye como perfecta, es una muestra más del infinito amor de parte de Dios hacia nosotros
Sin sumergirnos en la cantidad infinita de palabras que requeriríamos para hablar de su amor, definamos y de una manera sinteticemos su amor en aquel momento en el que él decide entregar a su único hijo, para el perdón y la salvación tanto mía como tuya.
Es increíble poder creer esto, en lo dicho hace un momento, que Dios, sabiendo y conociendo el pasado, el presente y el futuro de todos nosotros, conociendo y sabiendo la cantidad de errores y tal vez de actos malvados que podríamos llegar a cometer, él incluso sabiendo todo eso, no duda ni un solo instante en darlo todo.
Esa es la mayor prueba de su amor, amor que con los días pareciera que lo ignoráramos, o que su presencia fue tan constate en nuestras vidas que ya perdió la importancia, pero realmente esto no es lo que Dios merece, así como muchas veces le decimos lindas frases a nuestras madres o a nuestras parejas, de esta misma manera Dios también la merece.
Este grandioso ser omnipotente y que tantas bondades te ofrece, merece todo de ti, y aun cuando tu no cumples siquiera en darle gracias a él por cada bendición que permite que llegue a tu vida, el no continua de bendecirte; porque así es el amor, todo lo puede y todo lo soporta.
Su apoyo incondicional no tiene parámetros
El amor de Dios, dentro de su infinidad, nos da y deja a entender que aunque parezca que nunca vamos a tomar la decisión correcta, él siempre esperará a que tomemos esa decisión, y no siendo poco, él siempre esperará de tu parte lo mejor. Su presencia y apoyo incondicional no tiene parámetros, es simplemente amor, amor del que por más que te esfuerces, nunca podrás dar o recibir de otra persona, amor del que solo Dios te puede dar.
Lo que puedes hacer con ese amor que el padre santo te regala es aprenderlo, aprender la manera en la que Dios te ama, y de esta manera, convertirte en el reflejo de su amor, en ese reflejo que busca siempre todo lo bueno, lo correcto y lo sabio.
Poniendo en práctica la proposición anterior, así empezarás a reflejar el amor del ser que permitió tu existencia, pequeñas obras, que aunque poco significativas las hagas con el corazón, esas son las cosas que realmente mueven el corazón del padre santo, y esas son las cosas que a diario debes hacer, buscar agradarle cada día más.
Dedicatoria de tesis para Dios
El amor de Dios para con nosotros no tiene explicación alguna, simplemente porque de la manera en la que él nos ama, nadie más lo puede hacer, por esto mismo entendemos que es muy posible que al dediques tus más grandes logros en tu vida; y por ello a continuación encontrarás una dedicatoria de tesis a Dios, dirigida e inspirada plena y únicamente en él.
Dedicatoria
El amar a Dios es la mejor decisión que cualquier persona pueda llegar a tomar, determinarse a andar por sus caminos no tiene comparación; pero sus desbordantes recompensas de bendiciones, eso nos deja anonadados y llega a invadir todo nuestro ser frente a lo que sentimos.
Así fue para mi vida, decidí confiar y creerle a Dios, confiar en que por más obstáculos que se presentaran durante el desarrollo de esta tesis, cada producto de ella seria para su gloria y para su honra,
Él simplemente respondió a esto con más bendiciones de las que yo me pudiera imaginar, permaneció siempre fiel en mi vida y por eso hoy dedico mi tesis a Dios y le agradezco por amarme antes de que yo le amare a él.
Dios nos ayuda a cumplir nuestros objetivos
Soñar y hacer planes es aparentemente fácil, dejarte llevar por aquel éxtasis producido por tu mismo deseo de encaminarte hacia el éxito, todo esto es hermoso y motivante, querer cada día ser mejor, anhelar cada vez algo mejor, llegar a un nivel más alto y todo este tipo de cosas son las que a diario nos inspiran en nuestras vidas.
Sin embargo, a medida que iniciamos el cumplimiento de estos objetivos, es cuando en realidad nos enfrentamos con la realidad, una realidad que pareciera que tuviera como único propósito cortarte las alas y evitar que continúes en tu sueño hacia el éxito.
A pesar de ello, en aquellos momentos en los que las cosas no salen bien, justo en esos momentos te empiezas a dar cuenta de que en tus fuerzas ya no puedes más, y como por arte divino, Dios responde a esto y comienza a actuar en tu vida, cada día renueva tus fuerzas y te da nuevas metas y nuevos motivos para vivir y para hacer de tu vida, una vida integra y agradable ante sus ojos.